Este texto subraya la importancia de la dimensi?n vertical o geneal?gica de lo humano, hoy tan olvidada. Esta dimensi?n se vertebra en torno a la familia. No es sorprendente que en una cultura obsesionada con el presente y con la econom?a del tiempo o de la atenci?n nos hayamos olvidado un poco de nuestra condici?n diacr?nica y de nuestra radicalidad familiar. Es un error pensar en la disfuncionalidad de todo lo que no sea fruto de elecci?n, desde nuestro ADN hasta nuestros padres. M?s bien al contrario se hace necesario comprender y valorar su funcionalidad prest?ndole la atenci?n requerida. Con ello intentamos desbrozar los estudios de familia de varios tics idealistas que lastran una comprensi?n adecuada de los colectivos humanos y de su proyecci?n en el tiempo.