No est?n hechos de una pasta especial, pero su mirada orada la bruma del ma?ana. Son hombres y mujeres corrientes, tan s?lo vuelan y dejan estela... Son seres humanos con sus aciertos y errores, pero ensanchan el mundo y se hicieron acreedores del gozo de caminar en su compa??a.
A ninguno de ellos le convence el apelativo de "maestro", menos a?n de "gur?", pero lo cierto es que han marcado, bien en Am?rica, bien en Espa?a, la vida de muchos aspirantes, buscadores y caminantes de la senda del esp?ritu.
Alguno se conforma con el apelativo de "l?der", otros de "gu?a". Los hay que ni siquiera eso, no se autoconceden privilegios. El caso es que todos ellos ponen pilares del ma?ana, de una era definitivamente m?s fraterna y espiritual.
Son los "testigos de un nuevo tiempo", los que sugieren los principios y pautas del futuro, a veces incluso tambi?n los encarnan...
Ninguno de ellos podr?a presentar la Verdad en solitario, sin embargo cada cu?l encarna una faz de su inescrutable rostro.