El 12 de febrero de 2019 doce pol?ticos catalanes tomaron asiento delante de los jueces de la Sala Segunda del Tribunal Supremo. Oriol Junqueras (exvicepresidente de la Generalitat y exconsejero de Econom?a y Hacienda), Ra?l Romeva, (exconsejero de Asuntos Exteriores y Relaciones Institucionales), Jordi Turull (exportavoz y exconsejero de Presidencia), Joaquim Forn (exconsejero de Interior), Dolors Bassa (exconsejera de Trabajo y Asuntos Sociales), Santi Vila (exconsejero de Empresa y Conocimiento), Meritxel Borr?s (Exconsejera de Gobernaci?n), Carles Mund? (exconsejero de Justicia), Josep Rull (exconsejero de Territorio y Sostenibilidad), Carme Forcadell (expresidenta del parlamento auton?mico), Jordi S?nchez (expresidente de la ANC) y Jordi Cuixart (expresidente de ?mnium Cultural) estaban acusados de organizar y sacar adelante el refer?ndum y la declaraci?n de independencia de octubre de 2017.
Otros siete cargos pol?ticos, incluido el expresidente Carles Puigdemont, permanec?an fugados. Siete jueces, Manuel Marchena, Antonio del Moral, Luciano Varela, Juan Ram?n Berdugo, Andr?s Palomo, Ana Ferrer y Andr?s Mart?nez Arrieta, cuatro fiscales, Fidel Cadena, Jaime Moreno, Javier Zaragoza y Consuelo Madrigal, una abogada del Estado, Mar?a Seoane, la acusaci?n popular, que ejerc?a Vox con Javier Ortega Smith y Pedro Fern?ndez, y los abogados de las defensas, Andreu van den Eynde, Jordi Pina, Josep Riba, Javier Melero, Pau Molins, Marina Roig, Mariano Berg?s y Olga Arderiu participaron en el drama.
Culminaci?n de cuarenta a?os de traiciones a lo com?n, el proceso independentista catal?n fue la m?s importante afrenta a la democracia espa?ola desde el que en 1982 se produjo el 23-F. Con pasi?n, con rabia, con dureza y angustia, el autor de este libro sigui? su desarrollo v?a streaming y public? en el peri?dico La Raz?n unas cr?nicas entre el reporterismo y la columna, el atestado y el an?lisis.
Una cartograf?a por cap?tulos o una gu?a, altamente subjetiva pero veraz, de un pa?s al borde de la bancarrota sist?mica. Sirvan estas p?ginas como prueba de que las leyes garantizan la libertad de todos frente a la arbitaria tiran?a de los poderosos. O por decirlo con John Adams, 'Un gobierno de leyes, no de personas'.